Menu
En Villa Alemana,comienzan obras de mejoramiento de multicancha en población Hijuelas Grandes.

En Vi…

Colegio Los Reyes de Quilpuè,se impone en etapa regional de “Futbolito Ideal 2024” y avanza a la final nacional

Coleg…

Prev Next

    

                                                                                        

 

A+ A A-

Cuando nuestra piel se convierte en enemigo.

 

El 29 de octubre se celebra el Día Mundial de la Psoriasis, enfermedad dermatológica, inflamatoria y crónica que afecta a un 2% de la población mundial. En Chile, se estima que cerca de 500 mil personas la padecen, siendo más frecuente en el sur de nuestro país. Esta patología se da en hombres y mujeres, sin importar edad, sexo ni condición social, y puede darse con diferente intensidad. En este sentido, el Dr. Salvador Villablanca, dermatólogo de Clínica Ciudad del Mar, sostiene que esta es una enfermedad a la que hay que prestar atención constante para poder manejarla de la mejor manera posible.

Enrojecimiento de la piel, formación de escamas y picazón son algunas manifestaciones de este mal cutáneo que evidencia un malestar en la salud de la piel, incluida la piel del cuero cabelludo, genitales, palmas de las manos y plantas de los pies, así como también articulaciones y uñas. Ante estos síntomas, quienes padecen la enfermedad evitan mostrar su piel y lesiones.

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica que afecta principalmente a la piel, volviéndola más gruesa, inflamada, rojiza y, en general, cubierta de escamas. El Dr. Salvador Villablanca, dermatólogo de Clínica Ciudad del Mar, manifiesta que la psoriasis no es una infección y tampoco es contagiosa. “A pesar de ser una enfermedad crónica, con un tratamiento adecuado se puede controlar y tener una piel normal”, puntualiza.

El especialista de Clínica Ciudad del Mar explica que esta enfermedad dermatológica aparece como resultado de la aceleración del ciclo celular de renovación de la piel; lo que quiere decir que la piel comienza a remudar mucho más rápido de lo normal, provocando que la dermis quede más expuesta. Hasta la fecha, las causas que desarrollan esta enfermedad son desconocidas, pero es sabido que influyen factores genéticos, ambientales e inmunológicos.

Este mal afecta tanto a hombre como mujeres y no hace diferencia entre los diferentes tipos de pieles, ya sean claras, oscuras, secas, grasas o mixtas. Además, este trastorno se puede padecer a cualquier edad, aunque principalmente se da entre los adultos, sobre todo entre los 15 y 35 años. “Si bien hay una edad más frecuente en que se desarrolle, existe hasta un 25% de los pacientes que evidencia alguno de los síntomas en edad pediátrica”, sostiene el, Dr. Villablanca.

Tipos de Psoriasis

Esta patología tiene varias manifestaciones, siendo la psoriasis vulgar o en placas la más frecuente. Esta variante tiende a aquejar, sobre todo, a gente joven y de mediana edad, y se caracteriza por afectar la piel del cuero cabelludo, codos, rodillas y espalda.

Por otro lado, está la psoriasis en Gota o Guttata, asociada a infecciones bacterianas por estreptococo. Es común que se dé en niños y adultos jóvenes sin antecedentes previos de esta patología. Se caracteriza por una erupción súbita de pequeñas pápulas descamativas en todo el cuerpo.

Asimismo, hay variantes de la psoriasis que son menos conocidas, como la pustulosa, invertida (que afecta los pliegues, principalmente) y la ungueal, que se presenta como pequeños hoyuelos en las uñas, cambios de coloración y mayor sensibilidad al tacto.

Factores de riesgo

Existen varios elementos que pueden desencadenar la psoriasis y entre ellos se encuentran el factor hereditario, el medio ambiente y las emociones. “La genética tiene un papel importante, no es una condición indispensable para padecerla. Si ambos padres sufren de psoriasis la probabilidad que uno de sus hijos este afecto es de 40%, y si solo uno la tiene, la probabilidad es entorno al 15%. De todas maneras, aún no existen exámenes que digan con certeza si un paciente padecerá o no esta enfermedad”, explica el Dr. Salvador Villablanca.

En esta misma línea, el estrés físico, estrés psicológico, las infecciones bacterianas o virales pueden gatillar o empeorar un brote de psoriasis.

A pesar de que esta es una patología que ataca principalmente a la piel, cada vez son más los estudios que demuestran su asociación a fenómenos metabólicos y, por consiguiente, también al sistema cardiovascular. “Los pacientes con psoriasis tienen mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, incluyendo infarto al corazón, de modo que es importante indagar sobre la presencia de posibles factores de riesgo, para poder prevenirlos y tratarlos a tiempo”, declara el Dr. Salvador Villablanca.

Tratamientos

El diagnóstico de esta enfermedad es principalmente clínico, por lo que no son necesarios, en la mayoría de los casos, exámenes de laboratorio. Esto, ya que la psoriasis se detecta fácilmente por medio de la observación de las lesiones, localización, antecedentes familiares e historial clínico. El especialista de Clínica Ciudad del Mar sostiene que con dicha información, el dermatólogo es capaz de dar una prescripción médica clara y en base a ello, iniciar el mejor tratamiento para el paciente.

La psoriasis no tiene cura en la actualidad, pero si existen varios tratamientos disponibles para reducir los síntomas y signos. En este sentido, existen procedimientos basados en cremas y ungüentos, píldoras o inyecciones. También hay terapias de luz (fototerapia) que pueden ayudar a las personas a controlar la enfermedad. Eso sí, es importante recordad que cada tratamiento dependerá de la severidad de la psoriasis, los costos de los medicamentos y, lo más importante, la respuesta individual de cada paciente, pues cada caso debe ser tratado de manera puntual.

“La mayoría de los pacientes responden bien al tratamiento tópico, pero muchos otros necesitan probar distintos métodos o combinaciones antes de encontrar el que les funcione. Cada paciente necesita un tratamiento acorde con sus propias características y por eso es importante mantener una constante comunicación con el médico tratante”, puntualiza el dermatólogo de Clínica Ciudad del Mar.

Cómo enfrentar de mejor manera el nuevo brote del sarampión.

 

¿Qué es el sarampión? ¿Cómo se contagia? ¿Cuáles son los síntomas? ¿No estaba erradicado de Chile? Preguntas que muchos padres se hacen por estos días debido a la campaña nacional de vacunación contra la enfermedad y que han salido nuevamente a la palestra debido a los recientes casos de personas infectadas. La Organización Mundial de la Salud recomienda la vacunación de los menores con el fin de proteger a la población y en este sentido, el Dr. Marcel Deglin, pediatra de Clínica Ciudad del Mar, concuerda en la importancia que tienen las vacunas en cuanto a la protección y prevención de las personas.

El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa, de carácter epidémico, que se propaga por el contacto de gotas provenientes de la nariz, boca o garganta de la persona infectada o por secreciones. Este virus ataca fuertemente al sistema inmunológico, facilitando la aparición de convulsiones, encefalitis, otitis, neumonía e incluso la muerte. Sólo los seres humanos pueden padecer este virus.

En Chile, el sarampión estaba erradicado desde hace más de 20 años debido a una fuerte campaña de vacunación y concientización de la población. Este año y a causa de diversos brotes, se ha vuelto a poner énfasis en la importancia de que los menores se vacunen de modo que se fortalezca el sistema inmune de niños y niñas. Así, el periodo de vacunación se extiende hasta el 30 de noviembre.

El Dr. Marcel Deglin, pediatra de Clínica Ciudad del Mar, explica que esta enfermedad la puede padecer cualquier individuo de la especia humana. “Todos somos susceptibles a desarrollar este virus, aunque los grupos de mayor riesgo son los niños pequeños y las embarazadas que no hayan sido inmunizados. Por ello es que es importante mantener las vacunas al día y acatar las normativas de las autoridades”, sostiene el pediatra.

Cómo detectar el virus

Los principales síntomas de este virus son, en primera instancia, de índole respiratorio, como tos seca, rinitis aguda, conjuntivitis, cefalea y fiebre alta. La conjuntivitis se desarrolla con lagrimeo ocular e intolerancia a la luz (fotofobia). Estas manifestaciones se hacen evidentes después de la exposición al virus, entre los ocho y doce días posteriores. Esto es lo que se denomina como periodo de incubación. Todo esto viene acompañado de dolor muscular y de garganta.

Además, uno de los indicios más reconocibles son las erupciones cutáneas. Estas aparecen, en general, al tercer día después de los primeros signos de la enfermedad, empiezan en la cabeza y de ahí se desplazan hacia el resto del cuerpo, produce picazón y duran entre 4 a 7 días. Asimismo, es muy característico que aparezcan pequeñas manchas blancas dentro de la boca (manchas de Koplik).

“Este virus es una de las principales causas de muerte de niños a nivel mundial, por lo que es esencial tomar conciencia sobre la importancia de la vacunación. Una vez que se evidencien los primeros síntomas, los papás deben acudir a un recinto de salud y consultar con algún especialista, de modo que se pueda enfrentar este virus de la mejor manera posible”, recalca el Dr. Marcel Deglin.

Tratamiento

Esta enfermedad, por ser viral, no tiene tratamiento específico. De modo que se recomienda seguir una medicación sintomática en base a analgésicos, antipiréticos y abundante ingesta de líquido, hasta que el sistema inmune del paciente elimine el virus.

Si no hay un tratamiento, el sarampión puede presentar complicaciones como neumonía, ya sea por el virus o por sobreinfección bacteriana, otitis media agua, laringitis y, rara vez, miocarditis o pericarditis. En estos casos, la recomendación médica son los antibióticos.

Es importante recalcar que las personas que ya tuvieron sarampión o que han sido vacunadas contra la enfermedad, se encuentran protegidos ante nuevos brotes.

La importancia de las vacunas

En nuestro país, la campaña de vacunación contra el sarampión se realiza desde el año 1992 con el objetivo de reforzar la inmunidad de los menores. La vacuna que se aplica es la Tres Vírica, que protege contra el sarampión, la rubeola y las paperas.

Este virus se previene a través de la vacunación y forma parte del “calendario de vacunación obligatorio”, normado por el decreto N°1201 del año 2013 del Ministerio de Salud. De esta manera, el plan de la autoridad de Salud se concreta a los doce meses de vida del menor, luego hay una campaña en 1° básico, donde se vacuna por virus vivo atenuado. Posteriormente, hay re vacunaciones ocasionales por medio de campañas puntuales.

Algunos papás no quieren que sus hijos reciban esta vacuna porque creen que algunos de sus componentes podrían causar autismo. Tal teoría ha sido tajantemente negada por los organismos de salud, tanto nacionales como internacionales.

“Efectivamente hay efectos secundarios de las vacunas, como el dolor de la zona, pero esta desaparecen solas con el paso de los días. En sí, las vacunas en Chile son bastante seguras, ya que cuentan con todas las normativas, tanto de la Organización Mundial de la Salud, como del mismo Ministerio de Salud”, puntualiza el pediatra de Clínica Ciudad del Mar.

La realidad de enfrentar el día a día.

 

En Chile, son cerca de 80 mil las personas que sufren y conviven a diario con la artritis, enfermedad crónica, degenerativa y altamente invalidante, que afecta principalmente las manos y pies, y siendo las mujeres las más propensas a sufrirla. Sin embargo, un diagnóstico a tiempo puede hacer la diferencia. En el mes de la Artritis Reumatoide, la Dra. Lilith Stange, reumatóloga de Clínica Ciudad del Mar, nos invita a conocer más de esta patología en una jornada abierta al público y que busca visibilizar, a través de miradas, relatos y experiencias, la importancia de abordar precozmente las enfermedades autoinmunes.

Durante octubre, Chile y el mundo se unen en torno a la lucha contra la Artritis Reumatoide (AR), campaña que este año lleva por nombre “Muévete a tiempo” y que hace un llamado a la población a ver este mal como una enfermedad que puede presentarse a cualquier edad, ya sea en niños como en adultos, derribando el mito que es una dolencia exclusiva de la vejez.

La artritis reumatoide es una enfermedad crónica, inflamatoria y sistémica de causa autoinmune, donde nuestro sistema inmune no está trabajando de manera ordenada. De acuerdo a la Dra. Lilith Stange, reumatóloga de Clínica Ciudad del Mar, el sistema inmune que defiende nuestro organismo trabaja desordenadamente y reconoce como si fueran extraños algunos tejidos, provocando auto-anticuerpos que agreden las membranas sinoviales que recubren las articulaciones. “Esto es lo que ocasiona los síntomas de la enfermedad: dolor, inflamación y rigidez articular, además de fatiga, decaimiento, baja de peso y/o sequedad ocular”, explica la especialista.

Durante mucho tiempo esta patología se asoció al envejecimiento, pero con el tiempo y el avance de la ciencia médica se ha ido demostrando que la artritis se puede presentar a cualquier edad. “No siempre son los mayores quienes padecen de esta enfermedad, al contrario, puede presentarse a cualquier edad, incluso en niños ―artritis idiopática juvenil―. En el caso de los adultos, la edad de mayor prevalencia es entre los 20 y 45 años, siendo las mujeres las más propensas a desarrollarla”, puntualiza la reumatóloga de Clínica Ciudad del Mar.

Señales de alerta

La presencia conjunta de dolor articular, rigidez articular prolongada y fatigabilidad, son sin duda señales de alerta que debemos tener muy presentes, pues son síntomas que se instalan progresivamente, por varias semanas, y que van aumentando en intensidad. “Si es que alguna persona comienza a sentir alguno de estos síntomas, es esencial que acuda a un especialista”, señala la Dra. Lilith Stange.

Además, los pacientes que presentan dolor articular ―en zonas características como manos y pies― y bilateral, presentando rigidez o entumecimiento de sus articulaciones durante largos periodos (sobre todo en las mañanas) y que demora largo rato en desaparecer, son claros indicios de esta enfermedad y que requieren ser atendidos lo antes posible, de modo que se pueda retrasar el avance de este mal.

En cuanto a su diagnóstico, agrega la reumatóloga de Clínica Ciudad del Mar, siempre es a través de una evaluación clínica. Cada especialista reúne los datos del historial clínico del paciente y solicita un examen físico exhaustivo que viene a reforzar la sospecha de inflamación evidente de varios grupos articulares u otros signos físicos que orienten a otras enfermedades.

También se requieren algunos exámenes de laboratorio complementarios, que ayudarán a confirmar la hipótesis diagnosticada. En casos especiales, es necesario el uso de imágenes ―como ecografías― para confirmar la inflamación articular y de esa manera tener un panorama más claro.

GES

Desde el año 2007, la Artritis Reumatoide es una patología GES, por lo que garantiza el acceso a control y tratamientos tanto en la salud pública como privada. Estas garantías cubren consultas médicas, kinesiológicas, terapia ocupacional y fármacos sintéticos, entre otros.

“El tratamiento multidisciplinario es vital y hace la diferencia. Hablamos de una ventana de oportunidad para poder frenar el avance de la patología a los pocos meses de partir con terapia, con una estrategia dirigida a objetivos cuyo fin es mejorar pronóstico en su calidad de vida a largo plazo” indica la Dra. Lilith Stange.

Hablemos de Artritis Reumatoide

En el marco del cierre del Mes de la Artritis Reumatoide, Clínica Ciudad del Mar y Fundación Me Muevo realizarán la jornada “Hablemos de Artritis Reumatoide”, para abordar temáticas en torno a esta enfermedad.

El encuentro ―de carácter gratuito y abierto a la comunidad― se realizará el viernes 30 de octubre, de 16:00 a 18:00 horas, en el Auditorio del Centro de Extensión de Clínica Ciudad del Mar, ubicado en 14 norte 624, Viña del Mar, y estará dirigido a pacientes, familiares, especialistas y a todas aquellas personas interesadas en esta patología.

A través de esta instancia de conversación, mediante un debate serio y sincero en torno a la artritis, se dará cuenta de cómo es la vida de quienes padecen esta enfermedad y de qué forma es posible lograr su bienestar. Durante la jornada de sensibilización se exhibirá la película “Cake”, film que narra los efectos devastadores del dolor crónico luego de un accidente automovilístico, enviando un mensaje esperanzador a todos los pacientes que padecen de este mal.

Cáncer de prostata:Una batalla que no está del todo perdida.

 

Sus síntomas suelen aparecer de manera tardía, cuando ya la enfermedad se encuentra en una fase avanzada. Un mal silencioso con causas aún desconocidas para la medicina, que se diagnostica principalmente en hombres sobre los 50 años de edad, la mayoría de los casos con un buen pronóstico. De acuerdo al Dr. Claudio Fuentes, urólogo de Clínica Ciudad de Mar, lo importante es estar atentos a los factores de riesgos que la preceden para poder realizar un tratamiento oportuno.

En la actualidad, el cáncer a la próstata es la tercera causa de muerte, tanto en Chile como en el mundo, en hombres en edad avanzada. Esta enfermedad ha adquirido gran relevancia debido al aumento de incidencia y también como causa de muerte.

Dificultades relacionadas con la incapacidad para orinar, dolor en la parte baja ―zona de la pelvis y muslos―, orina con sangre o goteo al final de la micción, son síntomas que evidencian que algo no está funcionando bien en el organismo masculino, pero que no son necesariamente indicadores de un cáncer prostático, por lo que, según el Dr. Claudio Fuentes, urólogo de Clínica Ciudad del Mar, es necesario llevar a cabo un análisis médico completo para descartar mayores complicaciones.

La próstata es la glándula sexual masculina que se encuentra debajo de la vejiga de la orina, rodeando a la uretra. Casi no presenta síntomas y su avance es bastante tardío. “El carcinoma de próstata es un tumor de crecimiento muy lento y silencioso que tarda, por lo general, cerca de 5 años en dar metástasis y más de una década en provocar la muerte del enfermo. Así, su complejidad radica en que sus síntomas se hacen evidentes cuando ya es demasiado tarde”, manifiesta el urólogo.

En esta misma línea, es muy común que a los hombres que superan los 50 años se les diagnostique de Hipertrofia Prostática Benigna (HPB), que es el crecimiento de la glándula reproductiva cuando los hombres comienzan a envejecer. Esta patología se caracteriza porque se oprime la uretra, provocando problemas urinarios y vesicales. “La hipertrofia prostática no es un cáncer ni tampoco aumenta el riesgo de padecerlo en un futuro próximo. De todas maneras, hay que tomar atención a los síntomas y hacer chequeos médicos generales cada cierto tiempo”, puntualiza el Dr. Fuentes.

Respecto a los pacientes diagnosticados y que sufren de próstata agrandada, es recomendable un examen anual para monitorear el progreso de los signos y determinar si el tipo de tratamiento sigue siendo el adecuado.

Factores de riesgo a considerar

Existen diferentes variables que pueden provocar que un hombre desarrolle esta enfermedad, como los factores genéticos, hormonales, ambientales y/o agentes infecciosos. Así, la edad ―especialmente después de los 50 años― es un elemento clave en el riesgo de padecer cáncer de próstata.

Según cifras del Ministerio de Salud, más de la mitad de los casos se diagnostica precisamente en hombres de 65 años o más, pero si bien la probabilidad de desarrollar este cáncer aumenta si es que el paciente es un hombre mayor, es aún más relevante si es que hay antecedentes hereditarios: parientes en primer grado, como padre, hermano, hijo, tío o abuelo, o generaciones con cáncer a la próstata, con una probabilidad dos o tres veces mayor que el riesgo promedio.

Otros aspectos a considerar son la incontinencia urinaria, dificultades para orinar, interrupción del chorro de la orina, dolor en la región lumbar y dificultades en las relaciones sexuales. También puede haber pérdida de apetito y de peso e insuficiencia renal.

Prevención

La medición del Antígeno Prostático Específico es uno de los exámenes que se realizan para evaluar los niveles de proteína que produce la próstata. Si el resultado de ese examen refleja una cantidad elevada, significa que ya hay algo que no anda bien. Sin embargo, esta medición no es definitiva y no es suficiente para hacer un diagnóstico médico. En este sentido, es fundamental realizar exámenes físicos (tacto rectal), de imagenología y otros estudios avanzados, como una biopsia prostática.

De acuerdo al urólogo de Clínica Ciudad del Mar, no es fácil detectar o predecir la aparición de tumores o el avance de su crecimiento. De modo que lo importante es que exista una evaluación preventiva regular. “Es esencial que cada paciente analice su caso junto a su médico tratante (urólogo), en forma individual y tomando en cuenta el historial familiar, con el propósito de trabajar desde su control y prevención”, señala el Dr. Claudio Fuentes, urólogo de Clínica Ciudad del Mar.

Así, el llamado es a tomar conciencia de esta enfermedad y a no ser pesimistas. Un análisis y posterior tratamiento harán que cada persona, acompañada de su familia, pueda dejar atrás esta enfermedad.

Cuando el ruido ataca a nuestro organismo.

 

El movimiento diario, el transporte público, automóviles, fábricas, estaciones de servicios, entre otros, son algunas de las fuentes de ruido que provocan contaminación acústica en el ambiente y que dañan nuestro organismo, desde la audición hasta problemas al corazón, pasando por el estrés y el aprendizaje. Según el Dr. Cristián Bachelet, otorrinolaringólogo de Clínica Ciudad del Mar, lo importante es tomar conciencia respecto a este mal y preocuparnos desde ya de la salud de nuestro organismo.

La contaminación acústica es la presencia de ruidos y vibraciones en el ambiente que implican molestias, riesgos o daños a las personas y el entorno en el que están. Afectan a la población tanto en la salud, como en las relaciones laborales, de ocio y descanso.

El Dr. Cristián Bachelet, otorrinolaringólogo de Clínica Ciudad del Mar, explica que si bien la contaminación acústica, en casos de alcanzar dosis de ruido muy altas, puede llegar a generar daño acústico agudo ―que puede ser reversible―, lejos lo más frecuente es que la exposición mantenida por años genere un trauma acústico crónico, comportándose como una pérdida de audición progresiva bilateral similar a la pérdida de la audición por la edad (presbiacusia), pero más precoz en su etapa de presentación.

La intensidad del ruido se mide en decibeles (dB), unidad de medida de la presión sonora. El umbral de audición es de 0 dB (mínima intensidad del estímulo), mientras que el umbral del dolor está en 120 dB. El oído humano tiene capacidad para aguantar cierta intensidad de ruidos. Si estos superan los niveles aceptables pueden llegar a provocar daños al órgano auditivo.

Por lo anterior es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una intensidad no mayor a 50 dB en las viviendas y 70 dB en las calles, tomando en cuenta el tráfico y el comercio. Sin embargo, esto suele ser superado por las zonas de alta congestión y por el fuerte volumen de la música o TV a la que estamos acostumbrados. Además, está presente la exposición a otros factores, como las discotecas o conciertos, donde el volumen ronda los 90 – 100 decibeles.

En esta misma línea, la OMS ha señalado que no es aconsejable exponerse mucho tiempo a fuentes de ruido muy altos, pues se pueden desarrollar alteraciones en el bienestar personal, tanto físico como psicológico. “La dosis diaria recomendada siempre va a depender de la intensidad y el tiempo de exposición. A mayor intensidad, es menor el tiempo necesario para generar un daño”, agrega el especialista de Clínica Ciudad del Mar.

Cómo el ruido afecta nuestra salud

En el corto y mediano plazo, los efectos que puede provocar una exposición prolongada a grandes ruidos son psicológicos y físicos, donde destacan el estrés, fatiga, depresión y ansiedad. Además, se desarrollan trastornos de sueño, cefaleas, irritabilidad, dificultad de aprendizaje, alteración de la concentración y atención. Con el tiempo y si es que no se toman medidas pertinentes, se puede perder la capacidad auditiva ―principal y más reconocido síntoma―, pero también puede haber efectos cardiovasculares, gastrointestinales, predisposición a la violencia y disfunción sexual.

Otro efecto que provoca la exposición al ruido ambiental es la elevación del umbral auditivo, que implica que para poder escuchar los sonidos es necesario que estos sean más intensos que el promedio habitual. Ante este panorama, se recomienda utilizar audífonos, pues los pacientes comienzan a tener problemas de comunicación debido a la pérdida de audición.

El Dr. Bachelet sostiene que se debe acudir a un especialista cuando hay sospecha de pérdida de audición, ya sea brusca o progresiva, ante la aparición de ruidos en el oído (tinnitus) y/o cuando está el antecedente de exposición a ruido ambiental importante. “Las pérdidas de audición por exposición prolongada a ruido suelen ser irreversibles, por ello es que mientras antes se tomen medidas para controlar este mal, mejor será para nuestra salud”, enfatiza el otorrinolaringólogo.

Consejos para mejorar la salud auditiva

El especialista de Clínica Ciudad del Mar manifiesta que lo más importante es evitar lo más posible la fuente emisora de ruido. “Esto puede ser difícil en calles de grandes urbes, pues son zonas de alto tráfico, lo que explica el 80% de la contaminación acústica de las ciudades. Pero si se ponen los esfuerzos necesarios, se pueden evitar daños mayores a largo plazo”, declara el Dr. Cristián Bachelet.

· Considerar la emisión de música o TV a volumen moderado

· Evitar actividades ruidosas en horarios de sueño o descanso

· Usar tapones

· Considerar medidas de aislamiento acústico en el hogar, con materiales especiales para paredes y ventanas

· Evitar la exposición innecesaria a fuente de ruidos fuertes

· Al escuchar música en reproductores personales, preferir los audífonos over-ear o supra-auriculares (tipo fonos)

· Evitar los gritos y bocinazos

· Considerar medidas de protección auditiva para los trabajadores de industrias con fonos y tapones.

Además de las medidas mencionadas, lo importante es generar conciencia, sobre todo en los niños y adolescentes, de modo de ir gestando un cambio de hábito en ellos. Por otro lado, intentar colaborar en la reducción de ruido ambiental en las calles, al transitar, ya sea como peatón o como conductor.