Aguas servidas: Impulsan trabajo articulado entre la academia, la comunidad y autoridades políticas para combatir contaminación en el Litoral Central.

Científicas(os) del HUB Ambiental de la UPLA se reunieron con los diputados Camila
Rojas y Diego Ibáñez, además de representantes de municipios y de la comunidad de
Algarrobo y Cartagena, a fin de buscar colaborativamente soluciones para la falta de
tratamiento de los residuos que llegan al mar en la provincia de San Antonio.

Recientemente, los diputados Camila Rojas y Diego Ibáñez denunciaron públicamente
la constatación de que existe un grave problema de contaminación ambiental en
diversos puntos del Litoral Central. Tras una visita inspectiva, realizada junto a
dirigentes sociales y expertos, los legisladores identificaron que la situación más
preocupante se vice en las comunas de Algarrobo y Cartagena.

Ante este escenario, científicas(os) del HUB Ambiental de la Universidad de Playa
Ancha fueron convocados a una reunión, donde además de los parlamentarios,
asistieron representantes municipales y de la ciudadanía de ambas comunas. ¿El
objetivo? Impulsar un proceso de trabajo conjunto, que colaborativamente intente
buscar soluciones para esta problemática y las brechas existentes.
Es así como, desde el municipio de Algarrobo, asistió una delegación encabezada
por las concejalas Fernanda Vidal y Paloma Escobedo; representando a Cartagena,
estuvo presente Nicole Guzmán, presidenta del Comité Ambiental Comunal; y desde
Valparaíso, participó Alejandro Villa, director de Medio Ambiente del municipio porteño.

Una alianza a largo plazo
Como manifestó la diputada Camila Rojas, “pudimos abrir este espacio de trabajo
entre las comunidades y la academia, para que se pueda generar una simbiosis
importante que nutra ambos trabajos, para fortalecer el conocimiento que pueden
generar las universidades a través de casos reales y con impactos que también
pueden mejorar significativamente la calidad de vida de quienes habitan, cuidan y
disfrutan de estos ecosistemas”.
Algo que complementó el también diputado Diego Ibáñez, planteando que el rol del
HUB Ambiental UPLA, será vital para clarificar la situación. En esa línea, buscan
“hacer muestreos de agua, para evidenciar la contaminación, para poder poner a
disposición los profesionales al servicio de las comunidades, que hoy están
luchando por defender sus playas, por defenderse de la contaminación y también
mejorar la gestión de los servicios sanitarios”, destacó. “Así que estamos muy
contentos de esta reunión. Es un primer paso para establecer alianzas a largo
plazo, que permitan trabajar activamente por los pescadores artesanales, por la
junta de vecinos y también por el turismo en la región de Valparaíso”.
“Nuestro HUB se ha posicionado como un referente dentro de su ámbito de
investigación, siempre recogiendo las inquietudes de los territorios y poniendo
nuestras capacidades científicas y técnicas al servicio de las comunidades, sin
conflictos de interés”, recalcó, por su parte, la directora general del centro de
investigación, Dra. Verónica Molina. “Frente a esta problemática, que puede tener
incluso un alcance nacional, lo más importante es que podamos trabajar de forma
articulada y colaborativa, por lo que nos interesa impulsar, especialmente, un
trabajo en red con municipios, para generar acciones que también identifiquen las
particularidades de cada sitio de descarga”.
Urgente actualización normativa
A nivel general, no obstante, el diagnóstico es contundente respecto a la urgente
necesidad de actualización del Decreto Supremo N° 90, que regula los vertimientos de
aguas servidas al mar. No por nada, en Algarrobo, ambos parlamentarios evidenciaron
los efectos adversos que el emisario o tubería submarina de Esval provoca en el
ecosistema, mientras que, en Cartagena, verificaron los impactos asociados a la falta
de alcantarillado y los vertimientos en la quebrada que desemboca en Playa Chica.
En ambos casos, el efecto dominó que ser provoca es inevitable, pues la compleja
situación provoca no solo consecuencias ambientales y sanitarias, sino también
turísticas y económicas. Algo que refrenda Nicole Guzmán, presidenta del Comité
Ambiental Comunal de Cartagena.
“Esperamos que esta asociación con el HUB Ambiental UPLA nos permita saber
qué es lo que específicamente está trayendo esa agua que viene de la
desembocadura de las quebradas de Llolleo y de Las Mercedes, que terminan en
el mar pero que, además, traen una evidente contaminación, y con esos datos,
con esos parámetros científicos, serios, responsables, nosotros poder seguir
golpeando puertas para poder recuperar la playa tal cual como nosotros la
conocemos, de hace diez, 15, 20 años, que no tenía pasto, mal olor, que no tenía
la película verde que se genera postverano”, puntualizó Guzmán.