Estudio sobre nociones de justicia revela brecha entre la conversación ciudadana y la agenda mediática en Chile

 

La investigación de la Universidad Central analiza la relación entre la conversación
pública de los ciudadanos y los temas tratados diariamente por los medios de
comunicación.

Un estudio realizado por el Laboratorio de Conversación
Pública de la Escuela de Gobierno y Comunicaciones, y del Instituto de Investigación y
Postgrado de la Facultad de Economía, Gobierno y Comunicaciones de la Universidad
Central ha revelado una brecha significativa entre la conversación ciudadana y la
agenda mediática en el país. El informe, que corresponde a la segunda entrega de
“Corrientes Subterráneas», analiza la relación entre la conversación pública de los
ciudadanos y los temas tratados diariamente por los medios de comunicación.
El objetivo fue encontrar posibles vínculos e influencias entre la conversación
ciudadana y la agenda mediática dominante. Para ello, se realizó un análisis
exhaustivo de diversas plataformas de redes sociales y se examinaron los contenidos
publicados por los principales medios de comunicación.
Los resultados revelaron que la conversación ciudadana se enfoca principalmente en
aspectos sancionatorios asociados a delitos comunes en el ámbito de la justicia. Por
otro lado, los medios de comunicación suelen centrarse en los actores institucionales
y en aspectos más amplios relacionados con la justicia, como su funcionamiento y
administración.
En cuanto a la prensa analizada, se identificaron cuatro grandes dimensiones en las
que se enmarca el tema de la justicia, así como una serie de temas menores. Estos
últimos se refieren principalmente a cuestiones institucionales del poder judicial,
ejecutivo y legislativo, así como a asuntos internacionales. Los temas relacionados con
acciones y procedimientos policiales y militares ocuparon el tercer lugar, mientras
que los casos de corrupción ocuparon el cuarto lugar en la agenda mediática.
En contraste, la conversación ciudadana se centra en discusiones sobre opiniones,
emociones y en las formas en que las personas desean que funcione la justicia,
especialmente en el ámbito penal. Eso sí, se observa que esta conversación ciudadana
representa solo una pequeña parte de todo lo que los medios de comunicación
abordan en relación con la justicia.
“Las personas cuando hablan de justicia hablan esencialmente desde la insatisfacción
y el malestar de lo que ellos ven en distintas dimensiones, desde la administración de

la justicia hasta la justicia propia”, planteó Axel Callís, académico de la Escuela de
Gobierno y Comunicaciones y uno de los autores del estudio, en el lanzamiento de la
investigación que contó con la participación del fiscal Nacional, Ángel Valencia.
El docente añadió que una de las preocupaciones es que “poco a poco, se empieza a
legitimar la autotutela, la funa, las respuestas de las mismas personas, organizándose
para sustituir la administración de Justicia, eso nos pone en una sociedad salvaje. O
sea, es perder años de civilización”.
Mientras, el fiscal Nacional, Ángel Valencia, apuntó a que “hay una promesa no
cumplida de democratización del sistema judicial”, la que se arrastra desde la caída de
la valoración del sistema de justicia tras el escándalo del caso de las farmacias por la
insatisfacción de las personas sobre “cómo se podía involucrar a un bien muy valioso
como los son los medicamentos, y la respuesta que tuvo el sistema judicial fue
insuficiente frente a lo que exigía la ciudadanía”.
La directora de la carrera de Derecho, Maite Arauco, quien también participó del
lanzamiento, comentó que “la gente a través de las redes sociales lo que hace
inconscientemente es política; discutir conceptos filosóficos como lo es la justicia”.
El informe utiliza una combinación de herramientas cuantitativas y cualitativas para
analizar la brecha entre la conversación ciudadana y la agenda mediática. El objetivo
no es explicar causalmente esta brecha, sino constatar su existencia y plantear
posibles consecuencias en materia de política pública.
“Nos gusta ver qué es lo que hablan las personas en grupos de redes sociales, que no
sean grupos de política o contingencia, o sea, que no sean personas como sobre
entrenadas para dar argumentos”, explica Callís.
Este estudio pone de manifiesto la necesidad de un mayor entendimiento y diálogo
entre la ciudadanía y los medios de comunicación. De hecho, la brecha identificada
sugiere un debilitamiento del contrato social y plantea interrogantes sobre la igualdad
entre los ciudadanos.

 

Resume ejecutivo Corrientes Subterráneas

Corrientes Subterráneas aborda lo que conversan los chilenos sobre justicia, detectando que la
ciudadanía habla desde una profunda insatisfacción. El resultado es una convicción de que hay
impunidad en el sistema, basado en una percepción que proviene de la experiencia directa o
de personas cercanas, así como información secundaria que circula en las plataformas de
redes sociales asociados a casos de delitos comunes, faltas, incivilidades, entre otros, que
afectan a las personas en su vida cotidiana.
Etnografía digital
Esta ciudadanía en su conversación se enfoca en una discusión desde las opiniones y
emociones, así como en las formas, anhelos y deseos que tienen respecto al funcionamiento de
la justicia, principalmente penal. Es decir, las personas que participan de las conversaciones
que observamos en las plataformas de redes sociales, suelen interpretar la manera en que
suponen que funciona la justicia y el modo en que ellos creen que debería funcionar la justicia.
¿Cómo llegamos a esto? Mediante etnografía digital permanente, monitoreando la
conversación que distintos grupos de ciudadanos tienen en las plataformas de redes sociales.
Esta metodología permite romper las barreras de las cámaras de eco y filtros de burbuja que
se forman en internet, mediante una observación sistemática de relatos, argumentos y
experiencias que muestran personas de diversos mundos sociales. Nuestra función es
conectar las diversas subjetividades, buscando los aspectos centrales de las preocupaciones y
del relato común que expresan los ciudadanos.
En total, se revisaron 177 grupos de discusión, recolectando 1556 comentarios que hablan
directamente sobre justicia. Cerca de un 89 % de los comentarios se recopilaron en cinco tipos
de grupos (ver tabla 1). De estos comentarios, un 59,5 % fue realizado por mujeres y un 37,2
% por hombres (ver tabla 2), mientras que el grupo etario que más comentó es el que está
entre los 35 y 54 años (ver tabla 3).
Tabla 1 . Distribución de comentarios según tipo de grupo
Tipo de grupo Comentarios Porcentaje
General 563 36,2 %
Seguridad 364 23,4 %
Pensiones 166 10,7 %

2

Política 150 9,6 %
Bonos 140 9,0 %
Otros tipos 173 11,1 %
Total 1556 100 %
Fuente. Elaboración propia (2023).
Tabla 2 . Distribución de género de las personas que comentaron
Género Frecuencia Porcentaje
Mujer 926 59,5 %
Hombre 582 37,4 %
No identificado 48 3,1 %
Total 1556 100 %
Fuente. Elaboración propia (2023).
Tabla 3 . Distribución de tramos etarios de las personas que comentaron
Tramo etario Frecuencia Porcentaje
18-34 años 256 16,5 %
35-54 años 498 32,0 %
55-74 años 379 24,4 %
75 años o más 6 0,4 %
No identificados 417 26,8 %
Total 1556 100,0 %
Fuente. Elaboración propia (2023).
Podríamos categorizar nuestros hallazgos en torno a la justicia de la siguiente forma:

1. Polisemia del concepto: En las plataformas de redes social estudiada, el concepto de
«justicia» es polisémico y se usa para expresar insatisfacción en múltiples
dimensiones con su administración y aplicación en Chile. Esta insatisfacción es un
tema transversal.

2. Percepciones fragmentadas: Las personas expresan su comprensión de «justicia» e
«injusticia» desde perspectivas parciales, a veces acordes con los procedimientos del
sistema judicial y otras veces basadas en distorsiones, como, por ejemplo, confundir
roles o funciones dentro del sistema de justicia.

3. Impacto de las emociones: Emociones negativas relacionadas con la justicia generan
una percepción generalizada de la ausencia de un «sistema justo», en el que la
prevaricación pareciera ser una tendencia. Esto puede llevar a la aceptación de
normas y conductas ya proscritas, como la pena de muerte y a un potencial
incremento en la anomia.

4. Irrupción de la autotutela. Como consecuencia de la percepción de un sistema
judicial deficiente, algunas personas proponen o adoptan formas alternativas de
justicia —como autodefensa, seguridad privada o linchamientos—, considerándolas
legítimas y oportunas.

5. Uso de «funas». Las redes sociales facilitan la realización de «funas», actos que
pretenden una sanción social mediante la identificación pública de los datos de
acusados, muchas veces de manera anónima. Estas prácticas son cada vez más
comunes y operan como sucedáneo de la necesidad de justicia.

6. Enfoque en justicia penal. La mayoría de las conversaciones se centran en temas de
justicia penal, dejando de lado otros tipos como la justicia civil, local, ambiental o
tributaria. Esto muestra una tendencia a enfocarse en un aspecto particular de la
justicia en los grupos analizados.
Análisis de la agenda mediática
Para contrastar los hallazgos etnográficos, se utilizó la información que circula en la
agenda mediática. Mediante un análisis computacional de las publicaciones de prensa en los
que aparece la palabra «justicia» durante los últimos doce meses, se observó que la agenda
está protagonizada por actores institucionalizados, procedimientos, nominaciones, aspectos
administrativos y funcionamiento burocrático de las instituciones. Los resultados indican que
la agenda coligada con el concepto central se compone de treintaicuatro temas principales, los
que se pueden organizar en cuatro grandes dimensiones: contenidos institucionales,
internacionales, policiales y casos investigados, además de una categoría residual.
¿Cómo se llega a esto? Tras la selección de contenidos que contuvieran la palabra «justicia» y
que se publicaron durante los últimos doce meses, se analizaron los titulares y el cuerpo de
los documentos. Mediante un análisis de texto computacional se observó el volumen y las
relaciones entre las palabras centrales de los titulares. Luego, se desarrolló un modelamiento
de tópicos del cuerpo de las noticias para detectar los principales temas de los que se habla de
justicia. En el gráfico 1 se puede observar la distribución de los temas dentro de las cuatro
dimensiones principales, cuyos hallazgos señalan lo siguiente:
Gráfico 1 . Parejas de palabras más mencionadas en los titulares de El Mercurio y La Tercera (octubre
2022-septiembre 2023)

4

casas apuestas
ministerio justicia
ministro cordero
sierra bella
consejo constitucional
años golpe
crimen organizado
acusación constitucional
comisión experta
prisión preventiva
ley nain
nain retamal
democracia viva
colo colo
ministro justicia
chile vamos
50 años
corte suprema
presidente boric
fiscal nacional

0306090120
Número de menciones

Fuente. Elaboración propia a partir de datos obtenidos en ProQuest (2023).

1. Contenidos institucionales. En la prensa, la palabra «justicia» se asocia
principalmente con temas institucionales, reflejados tanto en titulares como en el
cuerpo de las noticias. Destacan cuestiones del funcionamiento del poder judicial,
designaciones, procesos constitucionales y procedimientos legislativos, enfocándose
generalmente en aspectos burocráticos y administrativos del Estado.

2. Diversidad de tópicos. Se nota una dispersión en los temas vinculados a «justicia»,
indicando un uso variado del concepto que abarca desde el poder judicial hasta la
cultura y el deporte. A pesar de esta variedad, ciertos temas prevalecen cuando se
agrupan los tópicos en diferentes dimensiones.

3. Combinación de tópicos: Aunque cada noticia puede mezclar varios tópicos
relacionados con «justicia», el informe destaca el más prevalente en el conjunto de
publicaciones, simplificando así la comprensión de los contenidos y su distribución en
la prensa.

5

Distribución de temas y dimensiones de El Mercurio y La Tercera (octubre 2022-septiembre 2023)

Institucional (~47%)Casos (~8%)Internacional (~17%)Policial (~12%)Otros (~16%)

 

Otros asuntos deportivos
Otros temas internacionales
Elección Consejo Constitucional
Asuntos generales de educación
Coronación Rey Carlos
Declaraciones expertas
Bukele y El Salvador
Derechos niñez y diversidad sexual
Asuntos de la macrozona sur
Caso Isapres
Literatura, cultura y similares
Cargos contra Donald Trump
Cinematografía de superhéroes
Acusaciones constitucionales
Caso Convenios
Asuntos políticos generales
Guerra Rusia−Ucrania
RR.II. Latinoamericanas
Corrupción en América Latina
Indultos presidenciales
Conmemoración golpe de Estado y DDHH
Asuntos generales municipales
Elección Fiscal Nacional
Casos municipales
Reforma tributaria y de pensiones
Elecciones en Brasil y Argentina
Proyectos de Ley
Asuntos familiares
Asuntos de acción de Carabineros y PDI
Sanciones a Colo−Colo
Comisión Experta Consejo Constitucional
Asuntos generales de gobierno
Delitos, crimen organizado y narcotráfico
Asuntos del poder judicial

Fuente. Elaboración propia a partir de datos obtenidos en ProQuest (2023).

6

Hallazgos
Al comparar la evidencia cualitativa y cuantitativa, se logró constatar que un 20 % de la
discusión mediática coincide con la totalidad de la preocupación que expresa la ciudadanía en
las conversaciones analizadas. Existe una brecha significativa entre los ciudadanos y los
medios de comunicación respecto al foco e intensidad que le dan a la justicia. La ciudadanía se
centra en temas punitivos, derivados de delitos y procedimientos judiciales, los que se
constituye en una parte importante de sus conversaciones. En contraste, los medios de
comunicación se ocupan de informar sobre actores institucionalizados y los procedimientos
de las instituciones.
Esta divergencia de foco entre ciudadanía y medios respecto del mundo de la justicia puede
amparar dos consecuencias:
1. contribuye a la crisis de confianza en las instituciones del Estado, ya que la
insatisfacción ciudadana detectada con la administración de justicia tendería a
disminuir la aceptación y el cumplimiento de normas.
2. La cobertura mediática disminuiría la importancia de los resultados efectivos y finales
de la justicia (sanciones o sentencias); debilitando, por ejemplo, el impacto de casos
emblemáticos en la sociedad como modelo demostrativo de respeto por la convivencia
social e igualdad ante la ley.