Jugadas ya la primera y segunda fecha de la Liga Nacional Femenina de básquetbol, el Club Deportivo Colegio Los Leones de Quilpué, lanza una de las primeras conclusiones de lo que fue el debut de este campeonato. D’Andra Moss, la promesa norteamericana que llegó como refuerzo, tras jugar en el Gran Canarias de la primera división de España, fue un gran acierto. Y cómo no, si en solo dos partidos anotó 71 puntos de un total de 186 convertidos por todo el equipo.
El sábado las felinas tuvieron un triunfo categórico de visita contra el cuadro de Brisas. Ganó 102-48 y ayer con la misma estrategia de juego se impusieron 84-46 ante Puente Alto. Cuatro tiempos que comenzaron relativamente parejos (20-19; 12-14) pero que a partir del tercer periodo tuvo un vuelco considerable, encestaron 25 puntos y las puentealtinas solo 2, resultado que les fue imposible revertir porque en el cuarto tiempo la racha continuó favorable con una diferencia de 27-11.
Según la pivot Paola Naranjo, fueron dos partidos muy distintos “el primero sirvió para conocernos y menos mal nos tocó un equipo fácil. Jugamos todas y las cosas se nos dieron positivamente permitiendo mostrar las opciones de juego personales de cada compañera. Mientras que en el segundo se nos complicó más el panorama. El otro equipo tenía jugadoras importantes individualmente que nos obligó a jugar más, pero como el equipo se vio cohesionado, sobretodo en el tercer cuarto, pudimos sacar ventaja apenas el otro equipo bajo los brazos. Una oportunidad para salir rápido y hacer goles fáciles de contra ataque”.
Para Paola Basaure, capitana del equipo, los resultados obtenidos fueron el reflejo de un equipo que va bien “el clima del grupo es súper bueno, si bien no todas habíamos jugado juntas, el apoyo inminente dentro y fuera de la chancha -desde la banca- más la asertividad en cuanto al marcador y la buena defensa individual nos hace ir un paso más adelante para llegar a las finales dentro de las clasificatorias. Sobre todo porque los otros equipos aún no están 100% integrados”.
Aun enfrentándose a estos buenos resultados D’Andra Moss, catalogó su participación como deficiente: “No fui lo suficientemente hábil estos dos primeros partidos me sirvieron para conocer el juego de mis compañeras y aunque fui goleadora no me siento satisfecha sobre todo con el partido de ayer (vs. Puente Alto) porque estuve muy lenta los dos primeros cuartos. Todo lo que lanzaba iba afuera y eso ya es suficiente motivo para estar descontenta y querer mejorar con más entrenamiento”.
Basaure justificó que el mal comienzo de Moss fue dado por las condiciones del gimnasio “la cancha era de cemento y en los dos primeros tiempos nos enfrentamos a un aro que no tenía la estatura reglamentaria y que no lo quisieron subir, pero después D’ agarró vuelo y subió la velocidad de su juego que en un principio anduvo muy lento”.
En el tercer y último cuarto Moss, aumentó la intensidad de la defensa, remató varias salidas rápidas y se mostró firme en el rebote defensivo. Características que deja a la vista la gran visión de juego que tiene esta jugadora que para todo el equipo es un gran aporte.
“La experiencia de D’ nos ayuda a tener otro ritmo de juego y nos sirve para aprender de ella y avanzar más. Su roce y su otra visión del básquetbol nos será de gran ayuda”, comentó Karla Quinteros, alero de las felinas.
En busca del roce cestero
Lamentablemente a la Sub 17 no le fue tan bien como a las Adultas. Tuvieron un debut donde ni los rebotes, el dribleo y las pantallas fueron suficientes para lograr un buen marcador. Contra Brisas perdieron 32-92 y ayer ante Puente Alto 52-45. Resultado que para la entrenadora María Ángelica Rivera fue “un desastre porque mostro al equipo débil en la defensa, las jugadoras entraron bloqueadas, muy ansiosas”, situación que asegura van a revertir con más trabajo técnico pero también sicológico: “a nuestras jugadoras les falta más roce y la participación en este campeonato les será de gran aprendizaje”, comentó.
Balance que para las jugadoras cobra sentido sobre todo porque sienten que no dieron lo mejor de sí. Sofía Cea, dijo que al equipo le faltó más unión “en ambos partidos entramos muy nerviosas, sobre todo contra Puente Alto, que siendo un partido totalmente ganable perdimos por falta de concentración y confianza con las compañeras”.
Fernanda Pillado, por su parte aseveró el nerviosismo “esto es una experiencia nueva para nosotras, íbamos un poco perdidas, no sabíamos mucho a quién nos enfrentaríamos, intentamos llegar de la mejor manera pero nos falto mas ser más equipo, no fijarnos tanto en las habilidades individuales e interactuar más con los refuerzos (Javiera García Constanza Morales) , lo bueno es que ahora que se integran a nuestros entrenamientos regulares andaremos mejor y podremos sumar a los partidos esa actitud de garra que nos caracteriza como Club. En estos partidos no se vio en un 100%, pero con un poco más de ese espíritu que tienen los leones demás ganamos la próxima fecha que será en casa”.
