Desde febrero del año pasado que la producción de la película “La pasión de Michelangelo” buscaba al actor indicado para hacer el rol de Miguel Ángel Poblete, conocido como el “vidente de Peñablanca”, en quien se basa la cinta.
“Era el personaje más complejo de encontrar para la película, porque tenía que tener características físicas particulares, tenía que ser muy joven, y claramente no podía ser un actor consagrado”, destaca Esteban Larraín, director del filme, quien cuenta que a mediados de año ya habían elegido quien haría el rol principal, pero que luego de unos ensayos se dieron cuenta que no estaba funcionando.
Complejidades del rol
Es así como volvieron a la etapa de casting, y lo ampliaron a la V Región. Así fue como se encontraron con el porteño Sebastián Ayala, estudiante de tercer año de Actuación de la Universidad de Valparaíso quien protagonizará el filme, cuyo guión fue escrito por Larraín durante la “Résidence” del Festival de Cannes 2009.
Desde hace un mes y medio que Sebastián se encuentra preparándose para lo que será su participación en la película. “La preparación de él es muy especial. Además del ensayo que se hace con los actores desde hace un par de semanas, necesita un coaching que incluía una voz y una mirada especial, entre otras cosas. Es bastante complejo”, comenta Larraín.
Sin embargo, Ayala se encuentra bastante comprometido con el rol que le tocó hacer. Tanto así que congeló sus estudios para estar cien por ciento disponible para la película, y así, por ejemplo, poder viajar a Santiago cuando lo necesiten. “Él se la ha jugado mucho por la película”, destaca el realizador.
La producción transcurre en 1983, cuando Miguel Ángel tenía 17 años y aseguró haber visto por primera vez a la Virgen María. Poco a poco la historia sobre el “vidente de Peñablanca” comenzó a correr, y durante tres años el joven acaparó portadas y programas de televisión con sus visiones. Cientos de personas llegaban cada día a verlo, y a profesarle su devoción.
Tanto así que el cerro El Membrillar, donde ocurrió el primer evento, cambió de nombre a Monte Carmelo, donde se erige un santuario con un pilar de 15 metros que sostiene la imagen de la Virgen.
Particularidades
El rodaje de “La pasión de Michelangelo” comenzará el 8 de noviembre, y se extenderá por seis semanas. Las dos primeras se realizarán en Santiago, mientras que las otras en locaciones de Villa Alemana y Limache.
“Si bien la película se basa en una historia real, tiene mucha libertad, mucha ficción. Por ejemplo, Peñablanca se recrea de una forma más rural de la que tenía para la época, y por eso las escenas las haremos en Limachito, que tiene una estética muy ochentera”, comenta Larraín; agregando que las tomas de las ceremonias se realizarán en un cerro gemelo del Monte Carmelo.
“Este cerro se asemeja bastante bien al real en cuanto a los vegetales y las nubes._Las nubes son importantes, porque en Villa Alemana -no importa si es invierno y verano-, siempre hay nubes”, sostiene el realizador que ya en agosto filmó algunas escenas de la película en cuyo elenco también destacan nombres como Patricio Contreras, Catalina Saavedra, Luis Alarcón y Patricia Rivadeneira.
Junto a ellos también estará el porteño Pablo Aravena, quien estuvo preseleccionado para interpretar a Miguel Ángel, y se quedó con el rol de “El Rucio”, líder de una banda de niños.
Aravena y Ayala no serán los únicos representantes de la región, ya que gran parte de los extras que participarán en las filmaciones son de Villa Alemana: “Aprovechando el interés de las personas en este proyecto hemos tomado como una especie de batallón de extras, que va a participar en la película como las primeras filas de esta marea humana que estaba alrededor de Miguel Ángel, y que después con técnicas digitales vamos a poder multiplicarlas”, cuenta Larraín.
El realizador dice que los villaalemaninos han acogido muy bien a la producción, porque entienden que está tratando el tema de la forma correcta para quien es uno de los personajes que habitan la historia de la ciudad.
Esteban Larraín tiene como idea realizar el estreno mundial de la película durante el Festival de Cannes 2011. Algo que depende exclusivamente del certamen galo, y para lo cual presentará un primer corte en marzo. Si no es así, el estreno sería para el 2012, para no tener que apurar la postproducción.
Villa Alemana en la mira
Esteban Larraín reconoce que la buena acogida que ha tenido de los villaalemaninos también se debe al interés de los habitantes de que se esté haciendo una película allí, aunque no es la primera vez que la ciudad sirve como telón de fondo de un rodaje. En 1996 se filmó “Bienvenida Casandra”, un largometraje dirigido por Marco Enríquez-Ominami, que tenía como protagonista al actual ministro de Cultura, Luciano Cruz-Coke, y en el cual también participaba Luis Jara. Su estreno se realizó en el Teatro Pompeya a tablero vuelto, aunque no contó con el mismo entusiasmo de la crítica. El teatro podría volver a ser utilizado para un evento similar, ya que Larraín quiere volver a mostrar en la ciudad el trabajo ya terminado.