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Frente al proyecto de ley presentado por el Ejecutivo que crea el Ministerio de Cultura, a la comunidad de Chile, la Asociación de Funcionarios del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, ANFUCULTURA, declara lo siguiente:

1. A diez años de la creación del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, creemos que la institucionalidad cultural en Chile requiere avanzar hacia la creación de un Ministerio de Cultura; que en estricto rigor debería llamarse Ministerio de las Culturas, incorporando y reconociendo bajo esa denominación la profunda y extensa diversidad que existe a lo largo y ancho de nuestro país.

2. Este proyecto resulta insuficiente, y no satisface las necesidades, aspiraciones y definiciones más elementales que Chile requiere, en su camino por el siglo XXI, en materia cultural. Esto lo sustentamos en las siguientes consideraciones:

a) No contó con participación activa y masiva de los actores y protagonistas del quehacer cultural. En particular, el acceso de los trabajadores del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes al proyecto señalado se redujo a un nivel meramente informativo, privando al proyecto de un elemento esencial y vital, fundado en el compromiso individual y conocimiento colectivo que hemos ido aquilatando a partir de nuestra propia experiencia de trabajo, la que sustenta la construcción e implementación de las políticas públicas en cultura.

b) Tampoco recoge ni incorpora un conjunto de conceptos que a nivel internacional existen actualmente en materia cultural. En efecto, no se consagran una serie de declaraciones que en las últimas décadas han provocado la necesidad de los Estados, muchos de éstos cercanos a nuestro país, de otorgar un nuevo marco para la elaboración y desarrollo de políticas públicas fundadas en la perspectiva de derechos culturales para las personas, colectivos, comunidades y países, conceptos tales como: creación, multiculturalidad, memoria, comunidades, derechos culturales, género, pueblos originarios, entre otros.

c) Asimismo, no se contempla la efectiva participación ciudadana en la estructura del Ministerio de Cultura que propone el proyecto, en tanto la composición y atribuciones del órgano encargado de aprobar las políticas culturales en Chile no incluye entre sus miembros, por ejemplo, a representantes de pueblos originarios ni de las regiones del país.

d) Por otra parte, se trata de un proyecto centralista, en tanto no crea las condiciones ni las estructuras necesarias que aseguren un desarrollo cultural efectivo de las distintas comunas y provincias del país.

e) En cuanto a los trabajadores, del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes el proyecto no asegura ni derechos ni condiciones laborales que permitan sustentar políticas de Estado a largo plazo; muy por el contrario, consagra una visión reduccionista y empobrecedora del empleo público, la que es inconsistente con las tareas y desafíos que un Ministerio de Cultura debe ofrecer al país.

3. Por la propia naturaleza de este proyecto, no sólo resulta necesario sino que indispensable, el iniciar un proceso de diálogo nacional, profundo y extenso, que pueda alimentar con bases sólidas la creación de un Ministerio de las Culturas. Para ello solicitamos a la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, encabezada por su Presidente el Honorable Sr. Victor Torres Jeldes, propiciar este diálogo, audiencia o consulta pública en las 15 regiones del país, a fin de debatir con la comunidad, las múltiples indicaciones que el proyecto deberá recibir. Para colaborar, organizar y concretar esta solicitud, ponemos a disposición de la Comisión, la estructura nacional con la que cuenta nuestra organización.

Es por todo lo señalado que CONVOCAMOS a toda la comunidad nacional, de Arica a Magallanes, a iniciar un debate ciudadano sobre estas materias; en especial, a las comunidades y redes de creadores, cultores, gestores y trabajadores de la cultura. Estamos convencidos que sólo de esta forma Chile tendrá el Ministerio de las Culturas que requiere.

¡Viva Chile! ¡Vivan sus Culturas!

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