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La académica de la Universidad de Santiago de Chile, Dra. Eugenia Dos Santos, sostiene que la grabación que complica al Presidente Michel Temer es una operación realizada por el mismo grupo que estuvo detrás de la destitución de Dilma Rousseff. La especialista indica que la única solución a la “crisis institucional” que afecta al país es una elección directa. “Las convicciones democráticas de Brasil están bajo sospecha”, advierte.

El Presidente de Brasil, Michel Temer, fue grabado por un empresario avalando el pago de sobornos para comprar el silencio del ex Jefe de la Cámara Baja, Eduardo Cunha. La situación motivó la apertura de una investigación por parte del Supremo Tribunal Federal. Con todo, el Mandatario rechazó renunciar a su cargo de manera tajante.

Al respecto, la socióloga brasileña, magíster en historia y subdirectora del Programa de Bachillerato en Ciencias y Humanidades, Dra. Eugenia Dos Santos, sostuvo que esto refleja que “Brasil hoy está en las manos de un grupo de conspiradores formado por políticos y empresarios, que tienen al pueblo como rehén de una gran organización”.

En entrevista con Radio Universidad de Santiago, la analista indica que dicha organización fue la misma que “tuvo la capacidad de crear una conspiración, que sacó a Dilma”.

“Los efectos de Lava Jato no los podemos olvidar. Financiaron al Gobierno de la Presidenta Dilma y hoy revelan lo que muchos habíamos visto como un gran golpe, que ahora tenía una segunda etapa”, insiste.

“Toda esta organización lo que pide hoy es poner otro Presidente, viendo la situación en Brasil. Creo que viene algo mucho más grave”, advierte. “Aquí hay una organización de la que solo se puede salir por medio de una elección directa”, agrega.

Para la socióloga, esta situación tendrá importantes repercusiones. “La confianza se recuperará muy poco en la ciudadanía, porque hay una sensación de engaño. Recordar que fueron 54 millones de votos los que eligieron a una Presidenta en un proceso democrático”, enfatiza.

“Si uno analiza la historia de Brasil, siempre hubo esta incapacidad de entender los procesos políticos”, lamenta, en alusión al proceso que terminó destituyendo a Dilma Rousseff y que, eventualmente, podría afectar al Presidente Temer si se concreta la petición del diputado brasileño Alessandro Molón.

“Lo que sucede en Brasil es lamentable y profundamente incoherente. Para cualquier analista o ciudadano brasileño es vergonzoso”, reconoce. La académica indica que “el colapso del sistema político venía siendo anunciado desde 2013”, en referencia al caso Lava Jato.

“Es una crisis institucional”, sentencia la académica. “El Congreso brasileño está completamente vulnerable. Todas estas instituciones están actuando fuera del eje normal. Las convicciones democráticas de Brasil están bajo sospecha”, concluye.

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