Logo

 

El especialista en salud pública y director de la Escuela de Medicina de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Mauricio Osorio, señaló que los casos registrados este año y que corresponden al doble en comparación al primer semestre de 2016, configuran un brote epidémico que evidencia la desatención de ciertos hábitos de higiene por parte de algunos sectores de la población.

El Ministerio de Salud informó mediante un informe de vigilancia que los casos de hepatitis A se duplicaron a nivel nacional. Hasta junio, se han presentado mil 184 enfermos en todo el país, mientras que el primer semestre del año pasado solo hubo 590 contagios. Según se explicó, una de las causas de este incremento son prácticas sexuales, variable cuyo impacto en este aumento no se había visto por lo que el Minsal la calificó de “inusual”.

Para el especialista en salud pública y Director de la Escuela de Medicina de la Universidad de Santiago de Chile, Dr. Mauricio Osorio, la cifra da cuenta de una situación que dejó de ser endémica y que, por lo tanto, “debe llamar a la alerta”, ya que el número de casos está configurando la aparición de un brote epidémico.

“La forma de contagio de la hepatitis A es por heces fecales, lo que significa que aquí han cambiado costumbres de la práctica diaria, que hacían que uno estuviera protegido”, explica el doctor. A su juicio, esto se debe a un relajo en cuanto a los hábitos de higiene de la población, la que debe entender la base del contagio, de allí la necesidad de extremar las precauciones.

En esa línea, el salubrista de la U. de Santiago indica que lo más importante es volver a educar a la comunidad respecto a los cuidados, síntomas y acciones que debe seguir a fin de evitar la enfermedad, tal como sucedió con las campañas contra el cólera, donde el Gobierno subrayó la importancia de la higiene de los alimentos para disminuir la cantidad de casos.

Para el Dr. Osorio, en este brote de hepatitis A es fundamental hacer hincapié en el lavado de manos y de utensilios, y evitar el contacto con personas contagiadas. “No es solo evitar ciertas prácticas sexuales, sino también, por ejemplo, cerciorarse de que la comida que uno se sirve fuera de la casa, responda a los estándares sanitarios”, enfatiza.

Finalmente, el especialista recuerda que algunos síntomas de la enfermedad son decaimiento en el ánimo y dolor de abdomen. “Habitualmente, la parte blanca de los ojos se coloca amarilla; la orina, de color té; y las heces, de color blanco”, puntualiza a modo de advertencia de la población.

“Si la persona se da cuenta de que tiene estos síntomas, debe consultar inmediatamente. La inflamación del hígado puede llevar a situaciones insospechadas”, concluye.

Marga Marga Online © Todos los derechos reservados.